28 octubre, 2004

Consecuencias de un post

(Publicado en BlogBis)

Cuando hace tres días publique mi Excursus Ironicus lo hice no en animus iocandi sino con la clara intención de epater le bourgeois. El texto fue levantado por Urgente 24 y armó un considerable alboroto, por el número de comentarios que generó obligó a extender el debate en un título aparte. (Lástima que El Editor no puso el crédito de mi autoría, aunque tuvo en portada por casi dos días mi dibujito)
Entre los comentarios recibí de mi amigo (y recargador de munición) Héctor una respuesta -y advertencia- brillante:

"Che, tené cuidado con lo que escribís, a ver si todavía algún cráneo político te hace caso. Tendremos que comer asado con cuchara, entonces alguien le sacara el ojo a otro alguien y van a prohibir las cucharas, con el problema que tendremos al tomar sopa con tenedor. "
"Como medio de defensa, sin cuchillos tramontina ni cucharas solo quedaría clavarle el tenedor en el cuello a nuestro agresor de turno. Con los políticos abstenerse. porque vendría alguien peor, que va a prohibir también los tenedores, (Tenedores Libres también , por las dudas vio? ), al fin tendremos que volver a la era prehistórica y comer como nuestros felices antepasados, con las manos. "
"A estos felices antepasados nadie les pedía credencial de legítimo usuario de piedras ni palos, no había abogados, políticos ni demás animalitos creados por la evolución de la especie, por eso eran re-felices!!!!!!"
" Saludos y buenos tiros"